Chiang Rai tiene su casa negra y su templo blanco, pero entre estos dos conocidos extremos, tiene también una extensa variedad de tonos de gris.

Chiang Rai tiene su casa negra y su templo blanco, pero entre estos dos conocidos extremos, tiene también una extensa variedad de tonos de gris.
Para satisfacer la curiosidad de los más cotillas, aquí están los números de mi paso por Tailandia, sin trampa ni cartón.
Hace tiempo conocí a una persona con una cualidad inmensa: la capacidad de sorprenderse. Daba igual las cosas que hubiese vivido…
Después de un mes viajando de un lado a otro de Tailandia, tratando de empaparte de todo cuanto ves y escuchas, estás casi casi lista para dar el paso hacia el siguiente país
Si después de pasearte por Tailandia, el siguiente destino de tu viaje es Birmania, es muy probable que acabes en Mae Sot, una ciudad fronteriza sin ningún reclamo especial…
Después del ajetreo en las bulliciosas ciudades tailandesas piensas que te vendrían bien unos días de vida más tranquila en zonas de rurales.
No sé cómo lo hice pero, de tres días que pensaba estar en Chiang Mai, al final me quedé más de una semana. No fue por sus templos…
Antes, mucho antes de que Bangkok tuviese un tráfico caótico, los tuc-tuc avasallasen a los turistas…
No eres muy de playa, pero no puedes irte de Tailandia sin pasar unos días en alguna de sus paradisíacas islas, en una de sus koh.
¿A quién no le ha pasado alguna vez que sale de viaje y el monumento principal que iba a visitar está en restauración?